La mostaza es uno de los condimentos favoritos para tener en casa porque aporta un sabor inigualable a las preparaciones, se puede consumir directo del frasco o cocinada, y su precio es bastante accesible. De hecho, es un acompañante idóneo para todo tipo de comidas, desde el popular hot dog que todos conocemos hasta algunas opciones más elaboradas. Veamos cuáles son.
Para los amantes de la cocina existen productos que son infaltables debido a su rico sabor y la elevación que regalan en cada preparación. Uno de los que lidera la lista en este sentido es la mostaza, pues con su sabor agridulce va bien con ensaladas, carnes, aderezos, entre otros.
Por supuesto, no solo se debe buscar que las comidas sean deliciosas, también es indispensable prever que las mismas sean de calidad y se preparan con productos que acompañen este principio, tal y como sucede con la mostaza inglesa. El éxito radica en elegir la que es más apropiada de todas las que existen en el mercado.
Dentro de los puntos indispensables que deben buscarse cumplir está el que sea una mostaza que no posea conservantes artificiales, ya que sabemos que la mostaza es un producto natural y que la salsa se extrae de sus semillas. Otros datos relevantes son que no posea colorantes o sabores extras para maximizar el valor de lo que se consume.
Aderezos especiales con mostaza
Los aderezos especiales son una familia numerosa y exquisita que tienen su principal objetivo en realzar el sabor de ciertas preparaciones, como las ensaladas. En este orden de ideas, la mostaza tiene un papel protagonista en opciones como:
- La vinagreta de mostaza y miel: es un clásico de muchas cocinas porque permite obtener una vinagreta que mezcla a la perfección el sabor ácido con el dulce de la miel. Funciona de maravilla en ensaladas que tienen lechugas como base y que se pueden complementar con patatas, pollo y maíz dulce.
- El aderezo de mostaza y naranja: es un aderezo fresco, ideal para los días de verano y se prepara muy fácil. Basta con agregar jugo de naranja a una cierta cantidad de mostaza y mezclar con vigorosidad. El resultado será un aderezo suave especial para ensaladas. Se puede volver un poco más dulce si se le añade un poco de mermelada de naranja, pero ya queda a gusto del comensal.
- Salsa cremosa de mostaza: esta es una versión que sirve para comer como pasabocas. Se mezcla la mostaza con mayonesa, frutos secos y algunos condimentos como sal o ajo en polvo, según lo que se tenga en casa. Es buena idea dejarla enfriar un rato antes de servir.
Comidas especiales
Los platos más elaborados también pueden contar con la mostaza dentro de los ingredientes básicos para dar realce de sabor y lograr resultados de un restaurante de lujo. Algunas opciones son:
- Pollo horneado: bañar el pollo en un aderezo, como una salsa BBQ, antes de meterlo al horno es lo que hace que quede jugoso y lleno de sabor. Pues bien, la mostaza es una base espléndida para complementar con otros elementos como el romero, el ajo y la cebolla y lograr un pollo delicioso.
- Strogonoff con mostaza y champiñones: es una receta tan rica y fácil de hacer que hasta un principiante podría obtener un 10. La idea es marinar los trozos de strogonoff con la mostaza y otros ingredientes y después saltear con los champiñones para obtener una carne jugosa, suave y llena de sabor.
- Costillas de cerdo con mostaza y miel: el resultado de este plato es único y hace que hasta el más exigente se enamore. Basta con marinar las costillas con la salsa de mostaza y miel, sellarlas y luego meterlas al horno para que terminen de cocinarse.
Cada una de estas recetas es sublime y son capaces de lograr aplausos de parte de los comensales. Hay que aprovecharlas como ideas para sorprender en cualquier momento a la familia o salir de un apuro con visitas.
