¿Qué son las Arrugas?
Las arrugas de la piel aparecen como el resultado natural del proceso de envejecimiento de todo ser vivo cuando se presenta una disminución de la capacidad de adaptación en cada uno de los aparatos, órganos y sistemas de nuestro cuerpo.
En consenso internacional se considera que a partir de los 65 años de edad oficialmente se es considerado como un anciano.
Sin embargo, con el paso de los años (más allá de que alcancemos esta edad) en nuestra piel pueden aparecer poco a poco líneas de expresión y arrugas, que a medida que pasa el tiempo se hacen cada vez más notorias, sobre todo en el área de la cara donde poco a poco se van formando las famosas patas de gallo.
¿Cómo saber cuál es tu tipo de piel y cómo cuidarla?
La piel es considerada como el mayor sistema del cuerpo humano la cual ocupa aproximadamente 2 metros de nuestro cuerpo con un espesor que varia entre los 0,5 mm en los parpados y los 4 mm en el talón, su peso aproximado es de 5 kilógramos y actúa como barrera protectora que protege a nuestro organismo.
Para cuidar nuestro cuerpo es imprescindible brindarle ciertos cuidados que nos ayudarán a estar más sanos, entre los principales consejos para cuidarla se encuentran:
- Protegerla del sol.
- Usar jabón suave.
- Tomar una ducha en vez de un baño completo.
- Secarla con suavidad.
- Abrigarse.
- Tomar mucha agua.
- Comer de manera saludable y equilibrada.
- Dormir lo suficiente.
- Dejar de fumar.
- Hidratarla a diario.
Este último consejo es sin duda uno de los más importantes ya que nos ayudará a mantener nuestra piel en perfectas condiciones ya que la hidratación es la base de una piel completamente sana.
Para ello es importantísimo conocer nuestra piel ya que existen diversos tipos de piel: piel seca, piel sensible y piel grasa, cada una de ellas con cuidados muy específicos.
Una vez que sepamos cual es nuestro tipo de piel podremos elegir la o las cremas idóneas para cuidarla y tratarla, lo que sin duda nos ayudará a lucir mejor cada día.
Eres lo que comes
El popular refrán “Eres lo que comes” no puede ser más acertado ya que la alimentación es en esencia y según diversos expertos la mejor medicina para nuestro cuerpo.
Aprender a comer mejor y por ende evitar los alimentos dañinos nos ayudará a tener un cuerpo más saludable y por ende una piel más sana.
En el mercado existen muchos alimentos que nos ayudarán a lograr este propósito, pero también hay otros que hacen todo lo contrario, entre aquellos que no son recomendables consumir o consumirlos lo menos posible son la leche, el azúcar, la carne y la sal, cada uno de ellos por diversas circunstancias que van desde las famosas grasas saturadas hasta las hormonas de crecimiento, evitarlos te hará sentir bien, pero sobre todo a lucir aún mejor.
Conclusión
Llevar una dieta balanceada, conocer nuestro tipo de piel, seguir buenos hábitos de cuidado personal, y usar los productos adecuados harán que nuestra piel luzca mucho mejor cada día.
Si a esto le aunamos una buena rutina de ejercicio lograremos el equilibrio perfecto en nuestra vida diaria que sin duda repercutirá a futuro y en todo lo que nos rodea, ya lo dice el dicho…
Verse bien para sentirse mejor.